Un nuevo estudio ha revelado que el síndrome de alcoholismo fetal es más común en la población mundial de lo que se pensaba, informó el Daily Mail. El trabajo, realizado en el Instituto para la Salud Mental del Centro de Investigación de Políticas para la Adicción y la Salud Mental en Toronto, Canadá, reúne 24 estudios hechos a 1.416 niños y jóvenes, y encontró que casi ocho de cada 1.000 bebés nacen con FASD.
El número era considerablemente más alto en ciertas poblaciones, incluidas las comunidades de bajos ingresos. Los niños que terminan en la atención son finalmente encarcelados o están en hogares de cuidados psiquiátricos.
El estudio, publicado en JAMA Pediatrics, es uno de pocos para estimar el número total de niños en el mundo que nacen con el síndrome de alcoholismo fetal. Los autores señalaron que los hallazgos ponen de relieve la necesidad de una investigación más amplia y un mensaje universal de salud para advertir contra la exposición en las mujeres embarazadas.
El consumo de alcohol durante el embarazo puede causar una amplia gama de efectos adversos para la salud. Los efectos de la exposición prenatal al alcohol pueden tener implicaciones para toda la vida, por lo que el trastorno del síndrome alcohólico fetal es costoso para la sociedad. «Globalmente, el FASD es una discapacidad prevalente relacionada con el alcohol y el desarrollo, que es en gran medida prevenible», explicaron los autores.
Con información de Daily Mail