Según las conclusiones de diferentes estudios científicos, la excitación y el orgasmo generan beneficios para la salud física y mental.
Todo se logra gracias a que en el acto sexual, son liberadas una serie de sustancias bioquímicas que favorecen las posibilidades de lograr una vida más larga y saludable.
También se descubrió la liberación (tanto en hombres como en mujeres) de serotonina, dopamina y siete neurotransmisores más que generan una "renovación hormonal en cascada" y provocan en nuestro organismo una serie de reacciones de reparación celular revitalizantes.
La razón, que el orgasmo va acompañado de la disminución de las plaquetas (células responsables de la coagulación sanguínea), lo que significa que facilita la fluidez del torrente sanguíneo.
Igualmente durante el clímax se libera endorfina con la que se relaja las paredes de venas y arterias facilitando también la circulación y evitando el desgaste de los vasos.
Lo cierto es que, sea por razones físicas o sea por causas orgánicas, está comprobado que tanto los hombres como las mujeres que se sienten plenos sexualmente tienen una apariencia mucho más juvenil.