El trasplante de órganos es una operación médica a través de la cual se consigue implantar un órgano vascularizado de una persona a otra, al tiempo que se busca mantener la circulación y la vida de ambos pacientes, dependiendo del procedimiento.
Los órganos que suelen figurar en la mayoría de estos procesos son el riñón, el corazón, el pulmón, el hígado y el páncreas, no obstante, también se realizan trasplantes de medula ósea, hueso, válvulas cardiacas, corneas e incluso de piel.
Asimismo, existen diferentes tipos de trasplantes, dependiendo de la necesidad, entre ellos están el renal, que se ejecuta con donantes que ya hayan fallecido; y el hepático, que se puede realizar con donante vivos o muertos. Cabe destacar que para que el órgano de una persona fallecida pueda ser donado, esta debe firmar un documento que lo autorice, así como cumplir con los cuidados de preservación necesarios.
En este sentido, anualmente, cada 27 de febrero, se celebra el Día Mundial del Trasplante, con la finalidad de que las personas recuerden que este proceso puede salvar vidas, y que es sumamente importante tomarlo en cuenta.
Con información de atusaludenlinea.com