Aunque este tipo de casos se da más que todo en las féminas que en los varones, lo cierto es que todos estamos expuestos a esto, confiamos ciegamente en una persona y de pronto, nos apuñala por la espalda y nos traiciona.
Por ello, psicólogos de la Universidad de Harvard, aseguran que antes de llevarse un (chasco) lo importante es conocer ciertos aspectos que nos ayudaran determinar en qué personas confiar y en cuáles no.
-No se interesa por ti. No hace falta decir que un amigo es incondicional, siempre estará contigo en las buenas y en las malas. Es obvio que a quienes nunca están en nuestros triunfos ni en nuestras penas no les importamos.
-Muestra acciones basadas en envidia. No hay más, la envidia es destructiva. Esta persona estará eternamente molesta con tus éxitos. Es algo que no comprende, ni lo hará. Para ella tú no te mereces nada. Muchas confundimos la envidia con la admiración, pero quienes te admiran saben valorarse y valorarnos.
-No guarda tus secretos. ¿Cada vez que le confiesas algo, ella va y lo grita a los cuatro vientos? Tememos decirte que tienes una muy mala compañía. Es claro que para que exista una amistad debe de haber confianza y lealtad.
-Te critica a tus espaldas. Es cierto, no todas las decisiones que tomamos en la vida son las correctas, pero ¿por qué no decírtelo en la cara?. Los que te quieren te darán críticas constructivas con el fin de mejorar y corregir tus errores.