Es importante que cuidemos nuestro lenguaje corporal incluso cuando estamos sentados, porque debemos evitar comunicar información incorrecta a las personas con las que nos relacionamos:
1. Sentarse en el borde del asiento. Los atletas en el banquillo de un equipo perdedor se sientan en el borde de los bancos porque están tensos y nerviosos, por lo que si haces esto en una entrevista de trabajo, frente a tu jefe o cualquier individuo, podrán percibirte de la misma manera.
2. Bloquear los tobillos. En los juzgados, los acusados son tres veces más propensos que los demandantes a sentarse con los tobillos bloqueados antes de un juicio y esto representa a un mecanismo de defensa del organismo que denota miedo o incertidumbre.
3. Recostarse cómodamente a una silla. Mientras estás en una conversación que implica seriedad y te recuestas del espaldar o te reclinas hacia atrás estás comunicando de forma inconsciente que no estás interesado en lo que te dicen, que te resbala.
4. Movimientos descontrolados. Si tienes un montón de energía y no paras de mover las rodillas o tocarte sus pies sin darte cuenta, es posible que debas entrenarse para darle freno a esta clase de tic nervioso. No parar de mover los pies o las manos significa impaciencia, nerviosismo o aburrimiento.